Esta mañana protestaron frente a la empresa. Además exigieron que se revea la ubicación de las máquinas de cobro en las unidades. Lamentaron la falta de apoyo gremial a sus reclamos.
Tras el último accidente de tránsito protagonizado por un colectivo de Saeta que terminó en tragedia pues falleció una mujer al caer de una unidada; la opinión pública se volcó a condenar la forma en la que manejan los choferes de transporte público, quienes, por su parte, señalaron que una de las razones por las que hay tantos accidentes (son más de 100 en el último año) es el régimen de velocidad al que están sometidos por parte de Saeta.
Según explicaron delegados gremiales que estuvieron en la protesta de esta mañana, en la ciudad de Salta y alrededores, la empresa aplica la llamada “velocidad uniforme” para medir el tiempo que deben recorrer las unidades entre un punto y otro. Esa velocidad es la establecida para los colectivos de larga distancia, que no deben sortear las complicaciones cotidianas de una calle citadina y tienen un rango de movimiento más uniforme. Por eso los choferes de Saeta piden que se comience a aplicar la denominada “velocidad variable”, una forma de medición que tiene en cuenta los pormenores del transporte en una ciudad y sería más adecuada para este caso, pues en ella se mide el tiempo de cada recorrido considerando las paradas, los semáforos, los posibles cortes de calles, incluso los baches que obligan a frenar a las unidades y retrasan el recorrido.
Otro de los reclamos que se escucharon esta mañana fue el vinculado al lugar que ocupan las máquinas de cobro en las unidades, generalmente puestas al lado de la puerta. Esto, señalaron los choferes, también ha generado accidentes. Además explicaron que el reclamo viene desde el año 2019, cuando ya presentaron notas y señalaron que las máquinas deberían estar ubicadas en otro lugar de las unidades. Aclararon además, que desde la empresa dispusieron ese lugar para que los choferes pudieran controlar que los pasajeros pasen efectivamente sus tarjetas por la máquina. “Esa es una tarea que no nos corresponde y deben hacerla los inspectores”, aclaró un manifestante a los medios.
Además más de uno lamentó la ausencia total en cuanto al apoyo gremial por parte de la UTA, a quienes señalaron por el abandono al que someten a los trabajadores. Esta mañana, el principal gremio de los transportistas brilló por su ausencia, aunque se vieron algunos delegados en la protesta.