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viernes, abril 19, 2024

Sinfónica | Concierto bajo la dirección de Eduardo Alonso Crespo

El jueves 8 a las 21 hs., la Orquesta Sinfónica de Salta ofrecerá un concierto bajo la dirección del Maestro Eduardo Alonso Crespo como director invitado.

Se interpretará Concerto Grosso, Op. 40, para orquesta de cuerdas y continuo, y Variaciones Dowland, Op. 12, para orquesta; ambas obras de su autoría. El concierto culminará con Romanzas para violín, Op. 40 y Op. 50 de Ludwig van Beethoven, con la participación de Gerardo Solórzano como solista en violín.

El concierto tendrá lugar en el Teatro Provincial Juan Carlos Saravia (Zuvirìa70)  y las entradas de $150 ya se encuentran a la venta en  www.saltaticket.gob.ar y en boletería del Teatro. Estudiantes y jubilados ingresan de manera gratuita acreditando su condición mediante tarjeta Saeta o libreta universitaria; jubilados deben presentar recibo de sueldo (se les solicita retirarlas por boletería días previos a la función para optimizar el ingreso de los espectadores a la sala)

Sobre las obras y sus compositores

Concerto Grosso op. 40, para cuerdas y continuo (piano)

Su formato de orquesta reducida queda como hito de estos difíciles tiempos en los que la orquesta no baja los brazos y sigue haciendo lo que sabe hacer: ofrecer la mejor música del mundo al público salteño a pesar de la actual crisis sanitaria. Y por otro, porque el concerto grosso es un formato que se caracteriza por presentar las individualidades – los “soli”, los solistas de cada sección – interactuando con el conjunto de la orquesta, el “tutti”, como una buena metáfora de lo que una orquesta realmente es, un grupo de individuos que saben ser “soli” o “tutti” según su arte lo requiera. La obra consta de tres movimientos: el primero – indicado como Tempo comodo, ma deciso – tiempo cómodo, pero decidido – intenta retratar justamente la actitud decidida que debe siempre prevalecer a la hora de entregar nuestro arte en el escenario, por encima de las circunstancias difíciles que nos puedan rodear. El segundo movimiento, Andante sostenuto, nace del ritmo de zamba – aunque extremadamente dilatado en el tiempo – para explorar un estado más nostálgico, tal vez representativo del paso del tiempo, estos veinte años de vida de la orquesta. Finalmente, el tercer movimiento – indicado como Allegro brioso – exhibe toda la potencia y el vigor que un grupo de artistas decididos y pujantes pueden ofrecer en los muchos años por venir. De hecho, la imagen visual que sirvió de punto de partida para este movimiento fue la de un tropel de caballos, liberados del corral y galopando libres por la pradera, la manera en la que queremos sentirnos cuando hayamos superados los obstáculos actuales.

Variaciones Dowland op. 12, para orquesta

En el año 1971, con 15 años, Alonso Crespo asistió a la proyección de la que hasta hoy considera la mejor adaptación para el cine de Macbeth, esa inmortal metáfora de Shakespeare sobre la ambición y el poder. La genial obra de Roman Polansky creaba un fresco visual tan impactante que muchos años después le sirvió como punto de partida para componer la música incidental para una exitosa producción teatral de la tragedia. Tiempo después, al programar un concierto que incluía las Variaciones Haydn de Johannes Brahms, se encontró con la necesidad de una obra que pudiera combinarse junto con esa famosa composición y que al mismo tiempo aportara una propuesta contrastante a la obra más seria y abstracta de Brahms. Recurrió entonces a aquella música incidental ya que incluía un número llamado Fiesta en Inverness (el castillo de los Macbeth) que desarrollaba un conjunto de variaciones sobre un tema de John Dowland, compositor inglés isabelino, contemporáneo de Shakespeare. Ese material proveyó el punto de partida para las Variaciones Dowland, obra estructurada en tres partes que se ejecutan sin interrupción. Un Prólogo establece el carácter – un tanto oscuro, intrigante y peligroso, derivado de la tragedia de Macbeth – para esta aventura musical. Luego de esta vasta introducción se presenta la música de Dowland instrumentada solo para vientos y percusión, seguida de un conjunto de Variaciones, incluyendo una Gymnopédie en la variación cuarta. Cuando todo parece llegar a un brillante final se introduce el Epílogo restaurando la atmósfera teatral de la introducción y llevando la obra a su conclusión. Desde su estreno la obra fue interpretada por la Orquesta Sinfónica de Salta, la Orquesta Sinfónica Nacional de Argentina, la Orquesta Sinfónica de Tucumán, la Orquesta Sinfónica de Rosario, la Orquesta Sinfónica de Entre Ríos, la Orquesta Sinfónica de Mar del Plata, la Orquesta Sinfónica Juvenil Nacional José de San Martín y la Orquesta Estable del Teatro Argentino de La Plata, y  en versiones a cargo de los maestros Eduardo Alonso-Crespo, Julio Lazarte, Andrés Spiller, Mario Benzecry, Abel Ghelman, Luis Gorelik y Bernardo Teruggi.

Eduardo Alonso Crespo

Uno de los compositores argentinos más interpretados en la actualidad. Es autor de seis sinfonías, quince conciertos, dos óperas, dos ballets, música de cámara y música coral – además de otras obras orquestales -, producción que le hizo acreedor de un total de dieciocho premios y distinciones nacionales e internacionales. Su música ha sido interpretada por orquestas y ensambles de Francia, Italia, España, Holanda, Portugal, Polonia, Ucrania, Alemania, Finlandia, el Reino Unido, China, Taiwán, Indonesia, Japón, Israel, Canadá, EE.UU., México, Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Paraguay, Brasil, Bolivia y Argentina, y en ámbitos tan importantes como el Teatro Colón de Buenos Aires, el Carnegie Recital Hall de Nueva York, la Iglesia de La Madelaine de París, la Gran Sala De Doelen de Rotterdam, el Teatro Teresa Carreño de Caracas, el Teatro La Fenice de Venecia y el Palacio Real de Queluz en Lisboa.

Se graduó en la Escuela de Artes Musicales de la Universidad Nacional de Tucumán, obteniendo en esa misma universidad el título de ingeniero civil. Mediante una beca Fulbright de postgrado estudió en la Universidad de Carnegie Mellon en los Estados Unidos, donde recibió el grado de Máster en Dirección Orquestal y Coral, luego de perfeccionarse con los maestros Lukas Foss, Leonardo Balada y Samuel Jones. Durante los siguientes dieciocho años se desempeñó como docente y como director en la Universidad de Carnegie Mellon en los EE.UU.

Como director de orquesta se desempeñó durante doce años como Director Titular de la Orquesta Sinfónica de Tucumán en la Argentina, actuando simultáneamente como Director Musical del Carnegie Mellon Contemporary Ensemble en los EE.UU. y manteniendo una intensa actividad como director invitado en la Argentina y en el extranjero. Fue artífice fundamental en la creación de la Orquesta Sinfónica de Salta en Argentina, organismo del que fue Director Invitado Principal y Compositor Residente. Sus presentaciones como director invitado incluyen organismos sinfónicos de los Estados Unidos, Francia, Portugal, México, Chile y Argentina. En su país de origen ha actuado al frente de las Orquestas Sinfónicas de Córdoba, Rosario, Entre Ríos, Tucumán, San Juan, Mendoza y Salta, así como de la Orquesta Nacional de Música Argentina y de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires, con la que debutó en el Teatro Colón dirigiendo una aclamada versión de la Cuarta Sinfonía de Gustav Mahler en 1998. Entre sus actividades más recientes como director se destaca la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, España, que Alonso-Crespo dirigió para el sello discográfico británico Naxos.

Para mayor información visitar: www.eduardoalonsocrespo.net

Las Romanzas para violín y orquesta Op. 40 y 50 fueron escritas con marcada gracia y levedad, tienen la misma forma de rondó mozartiano, con carácter elegante y nostálgico, con destacado tono intimista. El Romance para violín y orquesta nº 1 en sol mayor, op. 40 fue escrito en 1802 y publicado en enero de 1803, designado como el primero de Beethoven. El Romance para violín y orquesta nº 2 en fa mayor, Op. 50 fue escrito en 1798, es la primera de las dos composiciones, fue publicada en 1805, cuando ya se había presentado el Romance publicado como n° 1.

Beethoven compuso las dos Romanzas para violín y orquesta años antes que su Concierto para el mismo instrumento, escrito en 1806. La Romanza op. 50 fue compuesta en 1798 aunque publicada como nº 2 en 1805 y la Romanza op. 40 fue compuesta en 1802 y publicada en 1803 como nº 1. Ambas fueron compuestas para el mismo solista, Ignaz Schuppanzigh, y ambas comparten una similar estructura musical. De hecho, ambas poseen la forma de un rondó de cinco secciones, con un estribillo que se repite cada vez con nuevos agregados. La palabra Romanza era un término usado en la época para describir una composición – muchas veces lírica – de mayor extensión que un lied o un aria de ópera. Es decir, una composición no tan extensa como una sonata, pero lo suficiente amplia como para permitir formular un concepto musical lírico pero profundo.

Ludwig van Beethoven (1770-1827) Compositor, director de orquesta y pianista alemán. Era hijo de un músico y tenor de la corte, de quien recibió su primera formación. Es la figura central de la transición entre el clasicismo musical del S. XVIII y del romanticismo del S. XIX. Es considerado, junto a Bach y Brahms, integrante de «las tres B». Su carrera tiene tres periodos creativos: el primero enmarca composiciones con un modelo similar al de Mozart y Haydn, sin rasgos innovadores. El medio, o “heroico”, comienza después de la crisis por su lucha contra su creciente sordera, lo que genera la madurez de sus creaciones, con dominio absoluto de la forma y la expresión. El tercero, o “tardío”, se caracteriza por su profunda carga intelectual, sus innovaciones formales y su intensidad, en obras con un lenguaje armónico, poco convencional y apreciado en la época. Su arte se expresó en numerosos géneros, aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional. Entre 1798 y 1805 el compositor se dedicó a sondear intensamente las posibilidades del instrumento, un camino que lo llevaría a la perfección, como sus magistrales Sonatas para violín y piano.

Sobre el solista

Gerardo Solórzano

Gerardo Solórzano es miembro de los primeros violines de la Orquesta Sinfónica de Salta a la que se integró hace quince años mediante concurso internacional. Discípulo del Mtro. Julio Lazarte, lleva adelante una importante labor en el área de la música de cámara desde el año 2001 como integrante de la Camerata Lazarte, agrupación con la que interpretó extensos ciclos, siendo el más reciente de ellos la Integral para Violín Solo de J. S. Bach. A lo largo de estos dieciocho años interpretó la versión integral de los 85 cuartetos para cuerdas de Haydn, la integral de los cuartetos para cuerdas de Mozart, la integral de los cuartetos de Albrechtsberger, la integral de los cuartetos y de los quintetos para cuerdas de Mendelsshon, la integral de los cuartetos de Rimsky-Korsakov, y los cuartetos de Kopilov, Smetana y Sibelius, entre otras muchas obras. Su asociación con la música de Eduardo Alonso-Crespo incluye el estreno mundial de su Sexteto op. 27 para piano y cuerdas, y el estreno en Tucumán y Santiago del Estero de su Chacona op. 14 para violín solista y orquesta. Además de la OSS, fue integrante de la Orquesta Estable de Tucumán, la Orquesta de Cámara del Banco Empresario, la Orquesta Juvenil de la U.N.T. y la ya mencionada Camerata Lazarte de la que es actualmente su concertino.

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