La Cámara de Diputados de Salta se apresta para su segunda sesión ordinaria del año luego del receso de verano. Tanto en el temario de las sesiones como en el trabajo en comisiones no se avizora una agenda que contenga los temas urgentes.
A excepción de la problemática de la violencia de género, sobre la que se incorporaron destacados proyectos en las dos primeras sesiones, en la agenda legislativa aún no aparecen temas que ameritan su tratamiento por lo relevante y porque fueron planteados hace tiempo.
Por el contrario, lo que prospera tiene que ver con el interés de la presidencia como el proyecto tabacalero de exención del impuesto a las Actividades Económicas a la COPROTAB, o proyectos de declaración de escasa trascendencia.
En espera sigue el tratamiento de la ley para regular la Pauta Publicitaria para establecer criterios equitativos y evitar la discrecionalidad.
También hubiese sido necesaria una aclaración en la sesión respecto a la denuncia por desmanejos administrativos hechas públicas por la abogada Liliana Hermosilla, más allá de las facultades de la presidencia, una aclaración ante los integrantes del Cuerpo Legislativo y la ciudadanía, es más que necesaria.
Otro aspecto ausente en la agenda de Diputados es la problemática del transporte a pesar de que hubo que lamentar un luctuoso accidente y otros que no terminaron de manera fatal por pura fortuna.
Es claro que ningún diputado es usuario del transporte público, pero no pueden perder de vista de que del mismo dependen cientos de miles de ciudadanos de Salta Capital y alrededores.
Finalmente, se advierte que el trabajo en comisiones aún no alcanzó un volumen esperado y que la conformación de las mismas en muchos casos ha sido forzada e inconsulta.