21.4 C
Salta
viernes, octubre 31, 2025

El inesperado resultado del clásico y otra mácula sobre Chibán

Los ecos del partido del domingo 15 entre Central Norte y Juventud Antoniana, siguen resonando. Muchas voces aseguran que la victoria de los visitantes excedió lo meramente deportivo y en tal aseveración aparece la figura del funcionario y presidente de la Liga, quien ya se definió a sí mismo como un “mafioso”.

Que el fútbol sea “la dinámica de lo impensado”, como lo propuso el periodista Dante Panzeri, es un hecho corroborado en infinidad de ocasiones a lo largo del tiempo. Sin embargo, que Central Norte haya caído sin atenuantes ante su clásico rival por tres a uno, en un partido determinante que podía definir el descenso de un alicaído Juventud Antoniana, no parece tener mucho sentido desde lo futbolístico, sobre todo teniendo en cuenta el escenario que se había montado para el encuentro y –sobre todo-, el trayecto de ambos equipos en el Torneo Federal A.

Hay dos elementos que se exponen con nitidez al momento de buscar explicaciones sobre lo que pasó el domingo en el estadio Martearena, donde más de 15 mil personas se dieron cita para vivir una fiesta deportiva que se diluyó con los goles del rival y, al parecer, con algún tipo de arreglo espurio de dirigentes y referentes del plantel.

El primero de ellos es una reunión que muchos allegados, incluso dirigentes indignados, aseguran que tuvo lugar en las horas previas al partido y de la que habrían participado el presidente de la Liga Salteña de Fútbol y Secretario de Deportes de la Provincia, Sergio Chibán y el presidente (en uso de licencia) de Central Norte, Héctor “Peco” De Francesco, con ellos, un dirigente antoniano que podría ser su presidente, pero de todos modos, en el encuentro, comandado por Chibán, se habló de la inconveniencia de que un equipo salteño descienda por el costo que ello significa y hasta algunos filtraron que a cambio, desde la Liga se ofreció todo el lobby necesario para que Central Norte llegue a pelear un ascenso a la categoría Primera B Nacional.

Naturalmente de esa reunión no quedaron huellas ni se publicaron fotos, pero el fastidio de algunos dirigentes cuervos que no están de licencia, era notorio el domingo y luego del partido, más aún. No obstante, hay un antecedente de peso que certifica los contubernios entre Chibán y “Peco” De Francesco, ocurrió en noviembre de 2022, cuando el presidente de la Liga, forzó la transgresión del reglamento del Torneo, para que la semifinal del Federal A, entre Gimnasia y Tiro y Central Norte, se dispute en la cancha en la que hace más de veinte años, hace de local el club “cuervo”, cuando debía disputarse en terreno neutral o al menos, por mérito deportivo, el local debía ser el club “albo”. Ese encuentro, tuvo otros aditamentos extradeportivos como actitudes de barrabravas en algunos dirigentes y tras la victoria de Gimnasia y Tiro, los oficios de la Liga Salteña y la Secretaría de Deportes, desaparecieron en lugar de acompañar al representante de la provincia en la final contra Chaco For Ever que se disputó en Santiago del Estero.

A ello se le debe sumar que De Francesco, quien también es funcionario provincial, llevó a Central Norte a ser uno de los principales clientes de la marca de indumentaria deportiva de la Liga, es decir que estrechó vínculos económicos con Chibán.

El segundo elemento que da vigor al enorme fastidio de miles de hinchas de Central Norte tras el domingo, también de quienes desprecian que se vulnere el espíritu deportivo que debe imperar en el resultado de un partido, es algo de que fueron testigos algunos pocos y se dio en las acaloradas discusiones que llegaron hasta las manos, en el vestuario de Central Norte. Al parecer, allí hubo fuertes reproches internos porque algunos futbolistas entendieron que sus compañeros “fueron para atrás”, favoreciendo el juego del rival, en lugar de salir a disputar y ganar un partido que podía quedar en la memoria por mucho tiempo.

“Acá la cuestión es que se jugó con el amor y la ilusión de la gente, dirigentes, cuerpo técnico y jugadores. El domingo no jugaron, no metieron ante un rival que se arrastraba en el torneo”, escribió a modo de catarsis un caracterizado periodista deportivo y partidario de Central Norte quien al igual que muchos de sus colegas, concluyen en que en el seno del plantel hay un quiebre, como también lo hay en el plano dirigencial y eso impacta negativamente en la etapa decisiva del torneo y dificulta el objetivo de un ascenso. En los hinchas, también divididos, la desconfianza también alcanza al cuerpo técnico, encabezado por Víctor «Tano» Riggio.

Si bien es cierto que el descenso de un equipo salteño es un fracaso más del alicaído futbol provincial, eso también es un reflejo de paupérrimas gestiones dirigenciales, por lo tanto, las supuestas gestiones para “arreglar” partidos de parte de Sergio Chibán, un funcionario con notorias incompatibilidades para el cargo, no hacen más que auxiliar y premiar a quienes no hacen bien los deberes.

 

Chibán, mafioso ‘emPeñado’ | Una insólita confesión de parte

Más Leídas
Noticias Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí