Nuevamente las autoridades del Tren a las Nubes se encuentran en el centro de las sospechas. Los funcionarios son poco sutiles para meter la mano en la lata.
El escándalo protagonizado por el secretario del Tren a las Nubes, Cortez Gil, quien luego de ser descubierto al volante en estado de ebriedad había intentado amedrentar a personal de tránsito usando su chapa de funcionarios continua levantando polvareda. Si bien el gobierno decidió echarlo para curar al directorio en salud, ahora amenaza un nuevo escándalo.
Resulta que ayer se publicó en el Boletín Oficial, con la firma del presidente Carmelo Russo los resultados de un concurso de precios para el Tren a las Nubes que se habría hecho –atención lector- el 2 de febrero de 2019. O los funcionarios tienen una máquina del tiempo o el concurso es tan trucho como la fecha que pusieron.
Textualmente, la resolución de presidencia del directorio informa que “el concurso de precios –resolución 014/2019 del 21/12/2018 para la contratación de la Obra Remodelación Oficinas de Trenes, mediante Resoluciones Nº21/2019, ambos instrumentos de presidencia del directorio, aprobó el proceso selectivo llevado a cabo el 02/02/19 con un presupuesto oficial de $2.760.547,81″.
En definitiva, el texto oficial concluye afirmando que se “adjudicó a la empresa JMG CONSTRUCCIONES SRL dicha obra”.
Urtubey debió poner orden en el tren hace rato, pero parece que el que está en las nubes es él y sus funcionarios.