El Ministro de Deportes de Salta, Mario Peña, había anunciado en una entrevista brindada a la radio de su padre que una delegación de la FIFA visitaría la provincia para analizar la infraestructura y determinar si el estadio Padre Ernesto Martearena sería una de las sedes. Sin embargo, esta visita nunca se concretó.
La ciudad de Salta quedó fuera de las sedes oficiales del torneo internacional. La falsa expectativa que se generó en torno a la posibilidad de una promoción turística extra y promocione la práctica del más popular de los deportes, no fue más allá de vagas expresiones de deseo.
Medios especializados informaron que San Juan, Mendoza, Santiago del Estero, San Luis, Chaco y La Plata recibieron la visita técnica de FIFA a lo largo de los últimos días.
Es sabido que el estadio Padre Ernesto Martearena ha quedado en desventaja en comparación con otros estadios más nuevos, como los de San Luis y sobre todo el de Santiago del Estero. Sin embargo, es notoria la falta de mantenimiento del mismo, una tarea a cargo del área de Deportes de la Provincia
Es importante que los funcionarios públicos, en particular los ministros y responsables de Deportes, sean más cuidadosos al hacer promesas, antes de crear falsas expectativas en los ciudadanos.
Mientras eso sucede, hay quienes ven en la continuidad de Sergio Chibán como secretario de Deportes de la Provincia, una clara señal del desinterés del Ministro en el área ya que sólo prioriza la cuestión turística y hotelera, la cual forma parte de sus intereses privados.
Mientras tanto, la continuidad de Chibán como funcionario provincial, sigue siendo un hecho de manifiesta incompatibilidad por cuestiones de público conocimiento. Sumado a ello, pesa el antecedente de su autodefinición de «mafioso».