Roberto Feletti lanzó el plan de congelamiento de 1432 productos. Su debut, como nuevo secretario de Comercio Interior, estuvo cruzado por una apuesta que tuvo dos componentes: la urgencia del Gobierno por frenar los aumentos y remarcaciones que se registraron en septiembre y se aceleraron en octubre, y el desafío de, contra reloj, lograr un acuerdo con el mundo empresario.
Feletti buscó un punto de entendimiento que derivó el martes al atardecer en la firma de una resolución de congelamiento, retroactivo al 1 de octubre y hasta el 7 de enero, medida que formó parte de un «acuerdo parcial» con algunos sectores de la producción y la comercialización -algunos como Molinos Río de la Plata se opusieron abiertamente, al punto que de los 130 productos objetados, 68 son de esa firma- y que tiene por delante el otro desafío: lograr que la disposición se haga efectiva.
Ante el recelo empresario, la carta oficial es que funcione el dispositivo de control.