Pamela Calletti ocupara el lugar de Monica Lionetto tras que el gobernador exigiera la renuncia de todo el Gabinete.
El penoso resultado electoral llegó a la Fiscalía de Estado. Monica Lionetto fue otra de las renunciadas que dejarán atrás el paso por la gestión. Urtubey exigió la renuncia de la fiscal y presento a la ex ministra de Derechos Humanos y Justicia para ocupar ese lugar.
El poder de reciclado es instantáneo. Todavía no fue aprobada en su totalidad la Ley de Ministerios y Pamela Calletti ya tiene un lugar asegurado. Seguramente el balance de ambos organismos resultaba similar. La ex ministra fue duramente cuestionada por agrupaciones feministas en relación a la problemática de la violencia de género.
Los peores índices en materia de femicidio, y una cartera ausente que creyó en los botones antipánico pese a que estos no llegaron ni a ser un puntal de la gestión. El manejo de los fondos que se destinaron a ONGs y otros eventos lapidaron los recursos del Ministerio sin alcanzar un paliativo a la triste realidad.
La regla no cambió con la salida de Marianela Cansino, la unificación de Derechos Humanos con Justicia que plantearon en aquel momento solo sirvió a dar continuidad a los desaciertos en esta cartera.
Renovar la Fiscalía de Estado en apariencia tiene el único objetivo de no soltarle la mano a Calletti. Mónica Lionetto, la fiscal saliente, consiguió muy pocos resultados positivos para la provincia en materia Judicial.
El edificio que alquilamos por más de $ 10 millones de pesos para la noble tarea de Lionetto pasará a manos de la ex ministra. En su escritorio Calletti tendrá casos como el escandalo ocurrido en el Consejo de la Magistratura.
Los paupérrimos resultados del organismo y la necesidad de involucrar actores de la más íntima confianza llevan a la Cámara de Senadores a tomar la decisión final en el “renovado” nombramiento para la Fiscalía de Estado.
Fuente: Salta La Verdad