El Decreto Nº 1575, que se conoció ayer publicado en el Boletín Oficial de la Provincia, beneficiaba al diputado Martín Grande con un contrato de Promoción Industrial con el ex ministro de Ambiente y Producción Sustentable, Javier Monteros, por el cual se le otorgaba 500 mil pesos a devolverlos sin intereses en dinero o “en especies” en el plazo de 5 años.
Inmediatamente la noticia que contradecía la promocionada austeridad del gobierno se replicó en más de un medio, porque se le había aprobado al empresario, periodista y diputado nacional electo, Martín Grande, un contrato de promoción industrial para un emprendimiento.
Mediante ese contrato Grande se comprometía a la elaboración de quesos a partir de leche de oveja, con un beneficio por 500 mil pesos en certificados de crédito fiscal (CCF).
Los CCF son otorgados por el gobierno para reconocer los impuestos provinciales como el de actividades económicas, inmobiliario rural y el de sellos. Son transferibles, por lo que quien se beneficia puede cambiarlos por dinero.
Cuando estallaron las criticas, al mediodía, mediante un comunicado, el actual diputado nacional puso en duda las intenciones de aprobar recién ahora una petición que había realizado tres años atrás.
La respuesta de Martín Grande
«Hoy (por ayer) se conoció a través del Boletín Oficial de la Provincia, la aprobación de un contrato de Promoción Industrial a mi nombre, por un total de 500 mil pesos para la fabricación de quesos de oveja, en el establecimiento de mi propiedad, en el departamento La Caldera y tal como lo establecen «las disposiciones contenidas en la Ley Nº 6.025 de Promoción de la Actividad Industrial y su modificatoria Ley Nº 7.281”.
Dicho trámite comenzó hace más de tres años con suerte incierta y sorpresivamente después de mi elección como Diputado Nacional, me llamaron a firmar el contrato correspondiente», dijo Grande.
Agregó que «lejos de tratarse de un acuerdo millonario, por ese apoyo me comprometía a crear nuevos puestos de trabajo y devolver los fondos, como lo establece el Decreto Nº 1.575 del Ministerio de Ambiente y Producción Sustentable.
«Si bien considero que el pedido de apoyo para el crecimiento de una firma local, más el compromiso de devolución del beneficio, fue lícito y beneficioso para la comunidad; es un inconveniente para mi honor y buen nombre, y por ello he decidido renunciar al beneficio otorgado», finalizó.
Fuente: Nuevo Diario salta