El derrumbe fue de más del 3% con respecto a mayo y más de un 20% con respecto a junio de 2023. Destacan que, pese a que los precios se mantuvieron más estables, el consumo no levanta.
La actividad de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) industriales cayó un 20,4% anual en junio de 2024 y en el primer semestre del año acumula una retracción de 19,2% frente al mismo período de 2023. El dato surge del último Índice de Producción Industrial Pyme IPIP) elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Si bien este mes se mantuvo con costos y precios más estables, no alcanzó para despertar una demanda que refleja la caída en el poder adquisitivo de las familias en el gobierno de Javier Milei.
“Este cambio refleja la compleja coyuntura que atraviesa el sector. Si bien este mes se mantuvo con costos y precios más estables, no alcanzó para despertar una demanda que refleja la caída en el poder adquisitivo de las familias”, señaló CAME en un comunicado.
Según el informe, el 35,6% de las empresas consultadas señalan que la medida más esperada en este momento sería una reducción de impuestos, mientras que otro 14,6% menciona la flexibilización de las normativas laborales.
En la lista de prioridades, el tercer lugar de medidas esperadas lo comparten el estímulo a la demanda interna y los créditos blandos, en los dos casos mencionadas por el 13,6% de las industrias consultadas.
En cuanto a las problemáticas y desafíos, el 43,4% de los encuestados menciona la falta de venta, otro 34,9% los altos costos de producción y logística, y 11,1% las dificultades de acceso al crédito. Por otro lado, las industrias fueron consultadas respecto a las medidas tomadas en los últimos 6 meses para adaptarse al contexto. El 37,7% de las empresas afirmó haber reducido gastos operativos, el 22,6% dijo haber diversificado los productos y otro 20,7% redujo las horas laborales.