La asunción del nuevo secretario administrativo de la Cámara de Senadores de Salta se efectuó con un curioso juramento. ¿Se pueden admitir preceptos ocultos en un sistema republicano?
El juramento de Diego Sebastián Pérez como secretario administrativo de la cámara alta provincial fue el siguiente:
“¿Juráis por dios y prometed a la Cámara desempeñar con fidelidad el cargo de secretario administrativo guardando los secretos inherentes al cargo?Si así no lo hicieres, Dios ayude y si no, seréis castigado con las penas que las leyes imponen a los funcionarios infieles con la pérdida de vuestro cargo.”
Si bien el juramento del exdiputado, exsenador y exsecretario de Justicia de la Provincia, Diego Pérez, llamó la atención, sobre todo porque habla de “secretos”, existen razones legales que bien podrían impugnarlo.
El abobado y director del sitio Salta Transparente, Gonzalo Guzmán Coraita, un referente en la lucha por el acceso a la información pública, en diálogo con radio Infinito, señaló lo siguiente:
“Realmente llama muchísimo la atención esa fórmula de juramento, es antirrepublicana, porque justamente la república como forma de Gobierno se caracteriza por la transparencia de Gobierno en todos los actos”.
Además, el letrado consideró que “los secretos no existen en la República, es muy limitada su posibilidad y tiene que estar fundamentada en cuestiones se seguridad nacional o de gravedad que permita que ciertos actos estén reservados pero cierto tiempo. Hacer que un funcionario de la república jure secretismo es una locura”.
¿Juramento antiguo?
Otro aspecto observado por el profesional fue que la fórmula de juramento se hace de forma exclusiva ante Dios y no lo hace ante la Constitución, “estamos hablando de un funcionario cívico, no eclesiástico, eso también llama la atención”.
“Quizás sea alguna fórmula muy antigua que todavía siga utilizando el Senado, pero no va con nuestro sistema republicano ni con los estándares que debe tener la Provincia al haberse adherido a la Ley de Transparencia”, añadió.
Finalmente, Guzmán Coraita señaló: “lo recomendable sería que se declare nulo el juramento, de acuerdo a las formas republicanas, tiene que estar presente la Constitución”.