El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz y el ministro de Desarrollo Social de la Nación Daniel Arroyo firmaron esta noche en Casa de Gobierno el convenio para poner en marcha en la provincia el Plan Integral Argentina contra el Hambre con el objetivo de garantizar la seguridad y soberanía alimentaria de toda la población, sobre todo de los sectores más vulnerables.
“Ha llegado el momento de decirles a los salteños que Salta es pobre, tiene muchas falencias, problemas estructurales y necesidades. No se esconde la realidad, los problemas, hay que mostrarlos y enfrentarlos y para eso hay que trabajar de manera conjunta con Nación, municipios y comunidades”.
“Agradezco al equipo de Nación que nos vino a apoyar y a acompañar a las familias y esperamos que la próxima reunión sea para decirles que tienen agua potable y un sistema de salud como corresponde. Que no se mueran más chicos por hambre o desnutrición ese es el objetivo”, concluyó el mandatario.
“Empezamos a gestionar para que en el futuro la gente tenga agua, porque es difícil pretender terminar con la pobreza si no terminamos con obras de agua potable” indicó el mandatario provincial.
Y después de aseverar que los niños y sus familias terminan consumiendo aguas servidas en muchos casos, agregó también que la falta de respuestas a las diarreas es porque el sistema de salud está colapsado.
“A llegado el momento de decirle a los salteños que Salta es pobre” afirmó Sáenz, sobre la situación de la provincia y agradeció al gobierno nacional por dar respuesta a la muerte de los niños.
“No se esconde la realidad, hay que admitir que los chicos se mueren por desnutrición”, manifestó y finalizó: “La desnutrición no se generó en un mes, pero tenemos que trabajar mucho”.
Fuente: Aries/ Parte de prensa
