Recordemos que en el año 2003 fue electo presidente Néstor Kirchner, ya que Carlos Menem no se presentó a una segunda vuelta y tuvo que gobernar con un Congreso fragmentado, aunque alineó a toda la estructura peronista en su beneficio, que sumaba el 60,81% de las voluntades.
En materia económica, entre los años 2001 y 2003, Argentina tenía déficit fiscal por el pago de intereses de la deuda heredada de la convertibilidad, sin embargo, el país tenía superávit primario, esto implicaba que ingresos menos egresos daba un resultado positivo. Este le permitió a Eduardo Duhalde un gran margen de maniobra, ya que devaluó el signo monetario y no se espiralizaron los precios a la suba.
En la actualidad, entre los años 2021 y 2023 Argentina registra fuerte déficit fiscal primario, esto implica que ingresos menos egresos tiene resultado negativo, que financia con emisión monetaria porque nadie le presta dinero a la Argentina. Si, en este momento, el gobierno decide devaluar el signo monetario con el fuerte déficit presupuestario y emisión, es muy probable que la economía se encamine a un evento de hiperinflación.