Se trata de una escuela de San Antonio de los Cobres. Una docente se mostró preocupada por el ajuste en un área sensible.
Claudia Casimiro es una de las trabajadoras de la educación de la Puna Salteña que mantienen una protesta desde hace varios días. Junto a ellas, comerciantes, personal sanitario y camioneros reclaman mejoras salariales, inversión en medicamentos y una ambulancia para el área de salud y la pavimentación de la Ruta Nacional 51.
La docente advirtió que en la escuela donde enseña se ha cerrado el internado conocido como “Hogar Escuela” para los fines de semana. Según dijo la directora del establecimiento, la orden fue transmitida por el Gobierno Provincial debido a que “no hay presupuesto” para su manutención.
En declaraciones radiales, la profesora explicó que la situación se agrava por las condiciones de vida de la zona. “Los padres vienen a retirar los chicos desde parajes muy lejanos. No todos tienen para pagar y retirarlos. La directora no me da ningún argumento por escrito, solamente que se cerró por falta de presupuesto”, sostuvo.
Dicho programa estaría bajo la órbita de la Coordinación de Enlace y Relaciones Políticas que conduce Pablo Outes, a través del área “Planificación, control y gestión de programas” que tutela Carlos Lucca, quien se encarga de la ejecución tanto de programas nacionales como de iniciativas provinciales.
El argumento de la directora- citado por la docente Casimiro- acerca de que cerraron el internado del Hogar Escuela por “falta de presupuesto” contrasta con el discurso oficial que destacan las bondades de la minería en la Puna, una actividad que supuestamente genera beneficios para todos los sectores. Pero al mismo tiempo se ajusta un área sensible para su comunidad. mi