Los materiales se llevan el 72% del presupuesto para construir una casa y el peso de la mano de obra en un proyecto de edificación de viviendas es del 28%, según dio a conocer el Colegio de Arquitectos de Salta.
El Colegio de Arquitectos de Salta (CAS) publicó ayer un informe con los índices de costos para la construcción de una vivienda de 263 metros cuadrados. El relevamiento de los valores se hizo en este mes y arrojó un precio de $43.600 el metro cuadrado edificado.
La vivienda con la que el CAS realiza su relevamiento de precios cuesta unos $11 millones construirla. Es una cifra prohibitiva en tiempos en los que no existe el crédito bancario y la inflación hace inviable cualquier proyecto.
Por esa misma razón, las urbanizaciones por parte del Estado están paralizadas. No se llaman a licitaciones para nuevas viviendas sociales, no hay presupuesto para obras públicas y todo está supeditado a la incierta renegociación de la deuda del país.
«Nosotros ya estamos en una situación desesperante. No hay licitaciones de nada. A lo sumo podemos aguantar un mes o dos meses más en este estado de incertidumbre», advirtió a El Tribuno el presidente de la Cámara Salteña de la Construcción, Juan Carlos Segura (hijo).
El dirigente empresarial explicó que la obra que más trabajo da y moviliza su actividad es la edificación de viviendas, que no solo está paralizada en la parte pública sino también en la privada.
Proyectos sin avance
Según especificó el presidente de la Cámara Salteña de la Construcción, la anterior administración de Gobierno provincial dejó sin concretar 2.400 viviendas sociales que estaban proyectadas para los dos últimos años de gestión. El actual ministro de Infraestructura de la Provincial, Sergio Camacho, ahora busca fondos nacionales para realizar esas obras y otras 1.200 casas más.
El panorama es por ahora sombrío ya que en Nación poco y nada se avanzó desde el Ministerio de Vivienda y Hábitat (que está a cargo de María Eugenia Bielsa) por la falta de recursos.
Segura dijo tener la esperanza de que recién en mayo o junio se pueda ver alguna reactivación de la construcción, cuando haya una situación más clara del tema deuda y se cobre la cosecha de soja.
Fuente: El Tribuno
