El senador del departamento de San Martín, Manuel Pailler, quien además es médico, expresó su opinión ante la muerte de los seis niños wichís y las decenas de internados por desnutrición en Tartagal: culpó a la pobreza extrema de estas comunidades y el abandono del Estado.
Manuel Pailler, quien participó de la mesa multisectorial para atender la situación del norte provincial, manifestó ante las causas que considera como las que generan esta situación: «Se juntan varios factores, que son sociales, económicos y culturales. La enfermedad principal que aqueja a los aborígenes es la pobreza, porque todas sus necesidades básicas están insatisfechas. No consumen agua segura porque no tienen en sus comunidades, y al traerla de otro lugar exponen el agua a cualquier contaminación, ni qué decir del servicio sanitario, porque ninguna comunidad tiene cloacas, por lo mismo no tienen hábitos que son básicos, como lavarse las manos, como hace cualquier madre que tiene un grifo en su casa».
Respecto del estado de salud que deriva, principalmente de la pobreza, el senador explicó: «los niños aborígenes no tienen un régimen nutricional adecuado, porque no consumen la cantidad de proteínas que deberían y presentan un estado nutricional deficiente; algunos y a veces dependiendo del grado de desnutrición que presentan, están monitoreados, pero otras veces no. No son niños sanos, con un peso normal y por eso cualquier situación lo pone en riesgo, porque no es lo mismo tratar cualquier patología en un niño sano que en uno desnutrido».
«El Chaco salteño, como todos también lo sabemos, se ha transformado en un desierto por los grandes latifundios sojeros, y los aborígenes no tienen animales ni aves para cazar, peces para pescar, no tienen árboles de cuyos panales sacaban la miel de abeja y que conformaban en gran parte su sustento diario», agregó en una entrevista en El Tribuno dando cuenta de una extendida situación en esa región.
Por último hizo referencia al Fondo de Reparación Histórica, cuyo destino de fondos ha sido muy cuestionados en los últimos días: «Ese no fue un fondo de reparación histórica, fue un fondo de corrupción histórica que sirvió, entre otras cosas, para posicionar a un candidato hasta entonces desconocido pero que vamos a tener que pagar por muchos años todos los salteños».
