Comunidades indígenas de los departamentos San Martín y Santa Victoria Este expresaron su preocupación ante una situación histórica que ahora se ve agravada con la epidemia.
A más de cuatro años de declararse la emergencia sociosanitaria en el norte provincial, y con una emergencia hídrica prorrogada, habitantes de los departamentos Rivadavia, Santa Victoria Este y San Martín siguen padeciendo la falta histórica de un recurso básico como el agua potable. En el medio, el avance del dengue.
Marcela Calermo, dirigente de la comunidad La Mora en el departamento San Martín, expresó su preocupación ya que, según informó, dejarían de llegar los camiones aguateros a las más de 30 comunidades que habitan a la vera de la ruta nacional 86 debido al vencimiento de contratos. Denunció que hace más de tres semanas no reciben agua con los camiones que la empresa dice enviar para repartos. “Aguas del Norte publica que hay más de 30 camiones distribuyendo el agua, pero solamente son 8”, dijo.
“Llamé a los caciques y se están preparando para ir a Salta porque si nos quedamos aquí con los brazos cruzados es peor”, enfatizó Calermo, a la vez que remarcó: “La obligación de Asuntos Indígenas y Marcelo Córdoba es mandar los camiones. Solo mandan dos veces a la semana, nosotros cuidamos el agua pero tampoco es así. Después los chicos no tienen hábitos para lavarse la cara, para bañarse, tengo que estar privándolo. ¿Por qué?”.
Por su parte Antonia, integrante de la comunidad Santa María en Santa Victoria Este, denunció: “El tema del agua es muy preocupante. Está muy sucia, estamos tomando agua con basura. Tenemos un pozo. A la mañana el agua del grifo, pero sale amarilla, parece aceite. Los niños y grandes están con diarrea y vómito”.
Advirtió que la situación fue denunciada en reiteradas oportunidades ante las autoridades, aunque sin respuestas para la comunidad. “Me fui a hablar con gente encargada del agua, el encargado de Aguas del Norte en Santa Victoria Este, y no hay solución”, dijo.
En tanto, Calermo aseguró que ni el secretario de Asuntos Indígenas, Luis Gómez Amaraz, ni el secretario de la Delegación de Asuntos Indígenas, Marcelo Córdova, ofrecen contestaciones. Precisamente, respecto a Córdova, subrayó: “Él quiere al paisano que se quede callado y acepte todo lo que le den, pero yo no me conformo con que nos den un bolsón, hoy comemos y mañana hambre nomás para la gente”.
Por otra parte, la mujer se mostró preocupada frente al incremento de casos de dengue, señalando la dificultad que representa para las comunidades el almacenamiento del agua. “Si la depositamos mucho tampoco se puede por el dengue. No podemos tenerla reposando más de dos días”, detalló y aseguró: “Está colapsado Tartagal, la gente toma yuyos porque si esperan de los insumos no vamos a tener nunca”. Llamado para el ministro de Salud, Federico Mangione.
S.D.F.
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