Los hechos salieron a la luz gracias a la denuncia presentada por la madre de una de las víctimas, una nena que fue captada por Facebook.
El juez Martin Fernando Pérez condenó en juicio abreviado a Brisa Ailén Portus (20), alias “Bruchu”, a la pena de cuatro años de prisión por resultar autora de los delitos de promoción de la prostitución y coacción. Asimismo, Ricardo Alfredo Pol (50) fue condenado a cuatro años y ocho meses de prisión por el mismo delito, aunque fue sobreseído por los delitos “grooming” y tenencia de pornografía infantil por retiro de la acusación fiscal.
Según la investigación, la joven Portus oficiaba de “secretaria” de Pol y trabajaba para el captando mujeres. Justamente la pareja fue descubierta por la denuncia de la madre de una de las víctimas, menor de 15 años que fue contactada por Facebook a través de engaños sobre la contratación de “chicas para la limpieza de oficinas”.
Luego de aportar datos personales y enviar una foto suya, la víctima recibió un llamado de un tal Ricardo, quien ofreció adelantar el pago por la supuesta limpieza. Cuando se encontraron, en 2019, el hombre le dio 600 pesos y se fue. Tras ello la llamó insistentemente hasta ofrecerle dinero a cambio de tener relaciones sexuales. La joven aceptó.
A partir de ese primer encuentro el hombre comenzó a llevarla a un motel alojamiento y a una oficina ubicada en el centro de la ciudad. El sujeto le propuso mantener relaciones con otros hombres- que serían contactados por el mismo- a cambio de dinero y ante la negativa, le pidió que contactara a otras chicas de su edad, algo que también rechazo.
La denuncia fue presentada en enero de 2021, cuando la madre de la víctima notó comportamientos extraños en su hija, quien comenzó a llegar a su casa con dinero. Tiempo antes, en noviembre de 2020, la menor le confesó que tenía miedo de un tal “Riqui” porque tenía fotos y videos íntimos suyos. De allí en más le contó la verdad de los hechos.
El juez ordenó que la imputada Portus cumpla la condena con la modalidad de prisión domiciliaria bajo la supervisión del Sistema UADME, previo análisis de factibilidad. También se dispuso que ambos condenados se sometan a un examen médico y genético para su inscripción en el banco de datos, informaron fuentes judiciales.