Anunciado hace dos días por el gobernador Urtubey, la noticia del desdoblamiento de las elecciones, generó varias especulaciones. La principal: que la decisión habría sido para seguir sumándole facilidades a Fernando Yarade.
Los jefes políticos de la Provincia posibilitan, con el desdoblamiento de las elecciones, que Fernando Yarade tenga más tiempo para acondicionar el terreno de su candidatura a gobernador, ya que se harán luego de las elecciones nacionales. Además, posibilitaría conocer con mejor precisión cuál es el humor popular. Urtubey, Romero y el banquero Brito, están de acuerdo con la decisión, según se comenta.
Dos certezas se imponen según destaca el editorialista Daniel Avalos: “la primera es que, ante el descalabro de la matriz productiva del país, el incremento del desempleo y la pobreza, la fenomenal deuda nacional y un país atado sólo a los ingresos que pueda generar el campo, coloca en situación de vulnerabilidad no buscada a las provincias. Ante semejante diagnóstico, el Círculo Rojo ha concluido que los tiempos exigen como gobernador a un administrador experto que pueda presumir de logros concretos. El desdoblamiento permite entonces, en los hechos, afianzar esa candidatura en términos ciudadanos y palaciegos: lo primero supone el desafío de que una figura corporice aspiraciones colectivas; lo segundo, la articulación de un frente político mucho más amplio que permita al candidato visitar los rincones más periféricos de la provincia”.
Mientras tanto, Yarade y su propio equipo, empezaron a transitar la candidatura como suele hacerse cuando el candidato no es del todo conocido: recurriendo a los clásicos actores de la política provincial. Es de público conocimiento que Yarade no es de las figuras con mayor identificación entre los votantes, por lo que los intendentes son su gran estrategia. Son ellos los que ya concluyeron que en tiempos de incertidumbre como los que vive el país y la provincia, conviene aferrarse a lo conocido. Eso es lo que varias encuestas y estudios van mostrando también en Salta: quienes desean un cambio admiten que pueden patear el deseo para más adelante si identifican la posibilidad de conservar lo mucho o poco que tienen. Esos estudios provinciales fueron ahora corroborados empíricamente por las elecciones en seis provincias que evidenciaron que las pasiones “agrietadas” podrán ponerse en juego con las presidenciales, pero no necesariamente cuando deba definirse la suerte de la patria chica.
Siendo un hombre de negocios y finanzas, Fernando Yarade quiere mostrarse como el hombre qué entiende qué hay que hacer. Así como fue el que explicó tranquilamente en una conferencia de prensa que bajaría sueldos para subir impuestos, es quien se maneja con la imagen de tipo serio. Todavía no ha salido a los barrios a hacer campaña, pero sí se mostró interesado en asistir a programas televisivos populares, en donde puede dar rienda suelta a su labia como economista y contador, su mayor virtud.