El ministro de Economía giró el Presupuesto 2022 al Congreso de la Nación.
El mismo prevé ese año un crecimiento del PBI de 4%, una inflación de 33%, un rojo fiscal primario menor al de 2021, de 3,3% del producto bruto interno (el financiero llega a 4,9%), pero aún financiado en parte con emisión monetaria, un dólar mayorista que corra al mismo ritmo que los precios y un alza de tarifas segmentado.
Según el proyecto con la firma de Alberto Fernández y que ya ingresó en Diputados, el crecimiento estimado para 2021 es ahora de 8% (el proyectado un año atrás era 5,5%), algo que tanto Guzmán como el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas ya habían anticipado. La inflación llegará a diciembre con un alza 45,1%, un meta macro de precios muy por encima del 29% calculado hace doce meses. El dólar cerrará el año que viene en $131,1 y el salario real con un alza de 4% (38,3% nominal).
El déficit primario sería en 2022 de 3,3% (este año se calculaba en 4,5%, pero terminará en 4%, pero tomando los derechos especiales de giro -DEG- del FMI “arriba de la línea”). Para financiar el déficit se usará 1,8 puntos (este año será 3,6 puntos) del PBI en adelantos transitorios (emisión monetaria) del Banco Central de la República Argentina (BCRA). Por otra parte, el financiamiento en pesos llegará a 2 puntos del PBI.