Con la iniciativa, el senador nacional busca “garantizar la protección de los derechos humanos, la privacidad y la seguridad de los ciudadanos”.
“El futuro llegó hace rato”, dice Sergio Leavy para presentar el proyecto de Ley para regular la Inteligencia Artificial. Con esta frase de una de las canciones de Los Redonditos de Ricota el senador nacional salteño de Unión por la Patria intenta argumentar la necesidad de crear una Bicameral que avance en la “Regulación Estratégica e Integral de la Inteligencia Artificial (IA)”.
En su articulado la iniciativa establece “el estudio y análisis de las experiencias nacionales e internacionales en materia de regulación de la Inteligencia Artificial y otras innovaciones tecnológicas afines, a los efectos de elaborar la redacción de propuestas legislativas que establezcan un marco normativo orientado a la regulación estratégica”.
Además, impone un abordaje integral sobre “la actualización normativa de la legislación vigente ante su irrupción e impacto con el fin de garantizar la protección de los derechos humanos, la privacidad y la seguridad de los ciudadanos, fomentando la transparencia, la ética y la responsabilidad en su aplicación”.
La iniciativa tiene objetivos claros: “incentivar en el sector privado la competitividad y fomentar un perfil exportador que promueva la generación de empleo nacional ante la irrupción e impacto de la Inteligencia Artificial”; “incorporar perspectiva de género y de cuidado al medio ambiente en las estrategias, planes y objetivos de la normativa a elaborar”; y “resguardar la salud, seguridad y los derechos fundamentales de las personas de existencia real o ideal”, entre otros.
“Cabe preguntarnos por qué no abordar esta regulación desde las comisiones de trabajo unicamerales permanentes de cada una de las cámaras legislativas, y la primera reflexión nos obliga a dimensionar que nos encontramos frente a la irrupción de una revolución tecnológica que no tiene su parangón con el pasado y que su abordaje requiere un enfoque transdisciplinario y no departamentalizado o de compartimentos estancos como el que poseen las comisiones de trabajo legislativas”, fundamentó Leavy.