“El gobernador, como Maduro, adelantó la Navidad, metió el carnaval y se vistió de mariposa”, dijo el diputado nacional Carlos Zapata.
Una frase colorida para una realidad tan oscura. Zapata no solo ironizó sobre la actitud del gobernador Gustavo Sáenz, sino que también denunció la conexión entre el poder político, la justicia y el crimen organizado.
«La campaña es para hablar de propuestas, no para esconder cadáveres.El silencio del gobierno ha sido un patrón. En la causa Huergo fue atronador. En este caso, también”, subrayó.
“La aparición sin vida del comisario Cordeyro, sobre todo después de haberse medio determinada una trama de vinculación entre el poder político y el crimen organizado, tiene un alto impacto y gravedad institucional”, agregó.
“Desde el sector oficial del gobierno de la provincia se está buscando que se elimine el tratamiento diario del tema”, consideró y sostuvo: “Se va construyendo toda una teoría que apunta al suicidio… por formas extraoficiales nos decían que el comisario tenía problemas, que estaba depresivo”.
“No hay suicidio ni crimen hasta que se esclarece. Pero del sector oficial se hace muy poco para calmar la ansiedad pública”, indicó.
Mientras en Salta aparecen ex comisarios misteriosamente muertos y el crimen organizado avanza, el mandatario baila con sus candidatos al Congreso.
“El hecho de que el presupuesto de la provincia esté centrado en la campaña política del gobernador y desfinanciada la seguridad, por supuesto, trae consecuencias”, manifestó.
Y subrayó: “Cuando el hecho delictivo rosa al poder público, no se investiga, o se utiliza todo el poder económico del Estado para callar a los medios”.

“El Ministerio Público Fiscal viene dejando bastante que desear”, señaló y resaltó: “Las causas contra opositores avanzan rápido. Las que pueden tocar al poder político, duermen.”
Recordó que “la causa Huergo, iniciada en 2018, está dormida. Investiga la emisión de facturas truchas por 500 millones de pesos durante la intendencia de Gustavo Sáenz. A plata de hoy, serían 50.000 millones de pesos.”
“El principal imputado, Matías Huergo, presentó una moratoria reconociendo que debía los impuestos omitidos. Eso es una semiplenaria prueba. Y sin embargo, no avanza”, expresó.
Sobre la cadena de muertes sin respuesta
“Tenemos los casos de Janina y Luján, crimen dudoso. El de la turista francesa. El suicidio de Píccolo”, lanzó.
“Hace poco el imputado Saavedra se suicidó en la alcaldía bajo custodia”, agregó y dijo que “parece que cuando la cuestión es importante y roza al poder político, los protagonistas sufren una epidemia de suicidios. Eso no puede suceder en una provincia como Salta”.
“El narcotráfico también infiltró fuerzas federales. No hay que olvidarse de los casos de narcogendarmes”, finalizó.
“El propio Monges, en una conversación grabada, dice que tiene vínculos con el intendente de Vaqueros y con el secretario de Seguridad.”
Y concluyó:“Si el crimen organizado no ataca al poder político… es porque el crimen organizado está dentro del poder político”.
