El Intendente Municipal de Salta, Gustavo Saénz, visitó la ciudad de Orán, a donde no fue a supervisar desmalezados sino a reunirse con sus aliados políticos.
Según la oficina de prensa de la Municipalidad de Salta, el intendente Sáenz viajó a Orán «invitado» (se supone que por sus amigos) «para hablar sobre la situación política, económica, social y cultural de Orán».
En la ciudad norteña, Sáenz estuvo acompañado por el senador provincial Pablo González, electo por ese Departamento y en las listas del Partido Renovador de Salta, y por un grupo de dirigentes de la zona.
Añade la oficina de prensa municipal que el encuentro de dirigentes tuvo como objetivo «continuar fortaleciendo los lazos entre ambas ciudades y conocer las necesidades de los oranenses».
Al parecer, son los oranenses los únicos necesitados, ya que lo que pudiere llegar a afligir a los que viven en la capital de la Provincia, no fue objeto de esta reunión.
Al cabo de la reunión, Sáenz dijo: «No creo en las construcciones individuales». No se refería al edificio de la terminal de ómnibus, precisamente, sino a las construcciones «políticas», sobre las cuales el Intendente dijo que «hay que trabajar juntos, pensando en el bienestar de los salteños y dejando a un lado las mezquindades políticas».
También ha dicho el Intendente en la ocasión que está convencido de que la sociedad actual «exige gestiones con una alta capacidad de administración y de resultados no sólo a corto plazo, sino también a mediano y largo plazo», dando a entender que su paso por la Intendencia no ha de ser cosa de un solo periodo de gobierno.
Acompañaron a Sáenz en Orán los señores y señoras Marcelo Astún, Estela Crauzaz, Silvia Sabag, Carlos Arroyos, Lucía Rojas, César Cisterna, Jaime Justiniano, Neri Bordón, Carlos Alberto Villacorta, Ester Acosta, Federico Castellanos, Sebastián Domínguez, José Pons, Lolo Leiva y Sergio Monteros.