El historiador más reconocido, el profesor Miguel Ángel Cáseres editó otro libro acerca de la historia de Salta, haciendo hincapié en el Boliche Balderrama. En una entrevista con Opinorte, habló acerca de su nueva publicación y se refirió a la historia de Salta en general, y a la necesidad de conocer cuáles fueron las características de su formación, ya que sirve para comprender la actualidad.
Con motivo del cumpleaños 66 años del boliche Balderrama, como así también del aniversario de muerte de don Juan Balderrama, el profesor Miguel Ángel Cáseres presentó su obra «A orillitas del canal” ( historia del boliche Balderrama).
¿Qué lo motivó a sacar el libro sobre Boliche Balderrama?
Esto conforma parte de un plan de obras de unas 53 publicaciones. Todavía faltan 15 títulos que no están publicados. Es un trabajo de muchos años de investigación, en los cuales por ejemplo, tenemos la historia del Mercado San Miguel. Ya publicamos el tomo I de los 10 tomos que comprende el trabajo de historia de barrios, villas y calles de Salta. Nos quedan 5 tomos del carnaval salteño, y otros que ya están listos sobre músicos y el carnaval. En este proyecto se inscribe el trabajo sobre boliche Balderrama.
¿Qué busca representar con su última publicación?
El mismo estuvo en el marco de los 63 años que cumplió el boliche Balderrama. Trata de representar un homenaje a todos aquellos que han desempeñado el oficio, desde las viejas pulperías, los almacenes de ramos generales y los boliches, que los hubo y en gran cantidad. Por ejemplo, en el año 1801 en Salta había 56 pulperías. El oficio de las pulperías no es un invento de los Balderrama, ellos lo han tomado y lo han podido culminar de la mejor manera, porque hoy en día no es ni una pulpería ni un almacén de ramos generales, no es picantería, ni boliche, sino una peña de nivel internacional. Pero sí, es un homenaje.
¿Cómo inicia Balderrama?
Hemos rastreado desde la llegada de los padres de los Balderrama, que fue una pareja conformado por Remicia Zurita, que era cochabambina y Antonio Balderrama, que era peruano. Ellos tuvieron diez hijos, siete de los cuales fueron salteños, y que desarrollan esta experiencia que desembarca a partir de 1956, en San Martín y Esteco, de la mano de los tres hijos menores.
Hoy el boliche está administrado por la mujer y por las tres hijas de Juan Balderrama, uno de los hijos.
¿Alguna anécdota que el libro comente y le haya llamado la atención?
El libro de alguna manera es toda la historia, porque no hay otra publicación. Primero, por los costos, pero después porque la gente no te lee trabajos de alta dimensión. Nosotros desarrollamos allí parte de la historia que la dividimos en cinco etapas. Manifestamos quiénes son las principales personalidades que estuvieron en el boliche, y que ni siquiera lo llegan a entender los propios dueños de la casa, ya que solo lo definen como un boliche para la actividad propiamente del folclore.
Si ellos se ponen a ver, a Balderrama llegaron, por ejemplo, Los Ángeles Negros, Maximiliano Guerra, Antonio Ríos, Charly García y demás políticos.
No es que el boliche Balderrama sea solo del folclore, hay que entender, que ni siquiera le pertenece a los dueños. Los que escribimos, renegamos porque se nos ha quitado un lugar, dado que prácticamente hoy es un lugar visitado exclusivamente por el turismo internacional, aunque creo que ese es el mejor premio que ha podido recibir Salta, porque le brinda a la provincia una posibilidad de trascender y mostrar toda su cultura multifacética.
Los que escribimos, pretendemos tratar de que nuestra obra tenga la mayor proyección, esa es la aspiración de cualquiera. Balderrama, es una catapulta para proyectar en otras dimensiones todo lo que Salta puede aportar. Desde esa óptica hacemos este libro.
El gran desafío nuestro es darnos cuenta de que más allá que pueda haber alguien que reditúe con la actividad, no es algo que se pueda evitar. Pero lo que hay que ver es de qué manera se proyecta Salta sin causar daño (en el medio ambiente, en el proyecto de aculturación, etc).

¿Cómo se conecta esta publicación con otras que ya se presentaron, como por ejemplo, con la que data de la organización de la Ciudad?
Si vos hablas de la organización de la Ciudad, yo escribí un libro, que es para mí uno de los más importantes que escribí, que es el de los Calchaquis.
Habla de cómo el sector andino es importante en la conformación de la Ciudad, de cómo se organizaron las marcas, los ayllus, su cosmogonía. Y todo esto, con la intención de poder explicarnos a nosotros, porque nosotros desde el subconsciente psíquico y de la memoria tenemos un montón de cosas. Si vos vas a los valles, vas a encontrar que hablan de toponimios ancestrales, que siguen vigentes aunque están perdidos.
La ciudad de Salta hoy, lógicamente, no tiene nada que ver con la provincia a la que llegaron los Balderrama. Hoy en capital viven 700 mil personas, y, dentro de la parafernalia caótica en la que vive, está asentada en todo un marco ancestral. Te nombro tres o cuatro. El CCM está apostado sobre un antigal, el Centro Cultural América y toda la cuadra de la Mitre, el propio boliche Balderrama también está muy cerca de un antigal. Villa Las Rosas completa también, al igual que Chachapoyas.
Nosotros recorremos muchos lugares que desde la conciencia o el conocimiento fáctico, pienso, que la ciudadanía desconoce. Desde el subterráneo está presente.
Entonces, nuestra tarea como investigadores e historiadores es emerger o permitir que emerja, no para volver a vivir esos tiempos, pero si para explicar algunas cosas.
Las problemáticas de las inundaciones, por ejemplo, están explicadas por los desconocimientos de los técnicos de la historia de la Ciudad.
Por ejemplo, el canal de la calle España que están haciendo ahora debería haber sigo hecho sobre la calle Belgrano, para respetar el encauzamiento natural del canal del Tineo.
El ser humano se niega a aceptar el valor de la naturaleza y su relación. Le quiere competir a la naturaleza y en eso va a perder siempre. Su soberbia y la pedantería en esa controversia, lo lleva a cometer errores.
Hemos sacado ríos de Salta y encauzamientos de agua… Si vos ves mis libros, desde los Calchaquis, y vas sumando también la Fundación de Salta e historia de calles y barrios de Salta, si le vas sumando el libro que quieras, vas a ir haciendo una especie de tejido que te va a permitir llegar hasta donde a mí me gustaría llegar, que es poder entendernos.
La dirigencia política nos quiere convencer que no tenemos que mirar al pasado, y eso es mentira. Quieren negar la historia. No hay presente sin pasado y mucho menos futuro. O, el futuro va a ser desastroso.
El desafío es hacer publicaciones más cortas, porque hoy en nadie lee 200 páginas. Queremos hacer formatos chicos, y desde otra perspectiva en la narrativa, darle la amenidad dialéctica y literaria. Tenés que generarlo al lector.
Nosotros probamos a la audiencia, a los lectores… hemos hecho presentaciones de libros en diversos lugares, como el Cerro San Bernardo, locales gremiales, el Cabildo… y la gente va. Es decir que tenemos que tener presentes este público. La gente se siente cercana y eso es lo que a nosotros nos interesa.
Ese fenómeno, tenemos la enorme responsabilidad de respetarlo, de contenerlo, porque es un pequeño fenómeno para el desafío. La intención nuestra es esa y la expresamos hasta cuando hacemos radio. Yo digo, vos podés dar clases de historia hasta en chancleta. Lo importante no es eso, el tema es que vos no le podés quitar cientificidad a la exposición, y la tenés que poder respetuosamente al alcance del más “empigorontado” oyente como del más humilde. Tenés que hacer un esfuerzo didáctico pedagógico para que todos te escuchen y te entiendan. Que esté dispuesto a invertir su valioso tiempo para estar con vos.
