A la abogada tartagalense Sarah Esper le robaron 80 mil pesos y un celular. Según comento a la prensa al regresar a su casa, luego de ir a la fiscalía federal donde tenía una reunión, se dio con el robo.
Su madre, quien vive en la casa y se encontraba en esos momentos, un hombre tocó la puerta y le dijo que había sido enviado para arreglar el techo y como tal necesidad era cierta, la mujer lo hizo pasar. Fue en ese momento que el supuesto trabajador, tras revisar la vivienda, le pidió a la anciana un palo para verificar la condición de un sector del techo.
La madre de la abogada se dirigió al fondo y tras lidiar con dos perros, que querían pasar al interior de la vivienda, la mujer regresó con el palo. El obrero lo tomó, hizo unos movimientos y dijo que efectivamente había que hacer unos arreglos en dos sectores, pero que iba a necesitar comprar materiales.
El sujeto le pidió la suma de 750 pesos, por lo que la madre de la abogada le dio 500 pesos, y fue a su cuarto en busca del resto. Al salir, se dio cuenta de que el obrero venía por detrás, dándole el monto que faltaba.
Luego notó que el hombre estaba apurado por salir y al no poder abrir la puerta principal, lo hizo salir por una oficina de atención al público, siendo visto por un empleado, quien ayudó a la mujer a abrirle.
Cuando la anciana regresó a su cuarto, se dio con el faltante de 80 mil pesos de una cartera, como así también el teléfono celular. Por el hecho, la abogada radicó la denuncia y solicitó que se inicien las pesquisas en busca de los delincuentes.