Así lo dijo Eduardo López, secretario gremial de CTERA, en una entrevista con el canal C5N.
“Los chicos en clase se contagian y cuando vuelven a sus casas contagian a sus padres. Yo quiero poder abrazar a mis padres y a mis hijas”, sostuvo.
El sindicalista expresó su preocupación acerca de la posible existencia de una segunda ola de Covid-19. “Puede que todo cierre de nuevo en 20 días, no lo sabemos. Los casos están creciendo como el tamaño del Obelisco de Buenos Aires o la Torre Eiffel en Paris”, afirmó.
Además, hizo hincapié en que de sus 30 alumnos, 20 no tienen computadoras para tomar la clase. “Me gustaría que todos tengan computadoras para el 17 de febrero, día previsto para el arranque de clases”, admitió.
FUENTE: LA NACION