Gonzalo Caro Dávalos sufrió una arritmia en la tarde del martes y un pequeño coagulo llegó al cerebro provocándole pérdida de conocimiento. Afortunadamente fue asistido de manera veloz y en una maniobra riesgosa, descendió las escaleras desmayado y en silla de ruedas.
Cuando comenzaba el tratamiento del Proyecto de Ley para la implementación del Régimen Penal Juvenil, el diputado por Cerrillos y presidente de la Comisión de Justicia, tuvo un pequeño desvarío en el inicio de su discurso y pidió disculpas a la presidencia por no poder continuar con su alocución.
Con enorme esfuerzo se levantó de su banca y a pocos metros tuvo que ser asistido por uno de sus pares, el médico Bernardo Biella con el apoyo de personal de Enfermería de la Cámara de Diputados.
Las maniobras de primeros auxilios más los esfuerzos de empleados legislativos, permitieron que Caro Dávalos sea trasladado hasta una clínica privada a los pocos minutos.
“El diputado hizo una arritmia y tiró un coagulito que se fue a la cabeza, él no se acordaba de nada de lo que estaba hablando, ni se acuerda cómo llegó a donde yo estaba sin acordarse de que llegó caminando hasta ahí, lo llevamos a la enfermería, detectamos la arritmia y le dimos un anticoagulante”, dijo Biella al regresar a la Cámara.
Edificio histórico pero poco funcional
La arritmia de Caro Dávalos abre nuevamente un interrogante sobre cómo proceder de manera expeditiva ante casos de primeros auxilios cuando se presenta una emergencia en la Planta Alta del histórico edificio de la Legislatura provincial.
Cabe recordar que hace muchos años ha dejado de funcionar el ascensor que se había instalado sobre el ala sur del Palacio Legislativo, es decir en el sector que ocupa el Senado. La cancelación del uso del mismo se dispuso para no afectar la estructura del centenario Edificio.
En este cuadro, es importante que se elabore o reelabore un protocolo de acción eficaz para sortear la inaccesibilidad de la Legislatura provincial.